Ayer fui a trabajar, como todos los días, con la ilusión de poder ejercer mi trabajo que tanto me motiva y me llena, sobre todo, ante el  hecho de estar proporcionando atenciones  especializadas a personas con una enfermedad neurodegenerativa.

Soy directora del Centro de Día terapéutico Benicalap de AFAV donde aplicamos diversas técnicas innovadoras de estimulación cognitiva y física como musicoterapia, estimulación psicomotriz, animación sociocultural, robot terapia, terapia con muñecas… a enfermos de alzhéimer y otras demencias, personas con edades comprendidas entre los 45  y 98 años de edad.

Cuál es mi sorpresa al ver los Nuevos Decretos de  Tipologías de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, en los cuales priman los cuidados asistenciales a los terapéuticos, se aumenta la ratio de auxiliares de atención a la dependencia y se reduce a 0,5 la jornada del profesional psicólogo / psicóloga que se encarga de la estimulación cognitiva de las personas con demencia, sobre todo, en fases iniciales y moderadas.  

Apruebo, por supuesto, el aumento de ratio del personal de atención a la dependencia, ya que es fundamental en residencias y centros de día totalmente asistenciales siguiendo el modelo de Atención Centrada en la Persona, pero ¿qué ocurre con las personas en fases iniciales y moderadas  de la enfermedad, que requieren de una atención de carácter terapéutico más que asistencial?

Usuarios del centro de día Benicalap de AFAV

Si los profesionales médicos de neurología y geriatría están recetando a sus pacientes no solo fármacos, sino terapia de estimulación cognitiva como parte importante y fundamental de su tratamiento,  ¿qué Atención Centrada en la Persona se les está dando a dichos pacientes reduciendo las horas de los profesionales encargados para tal fin? Cuando, además, se ha demostrado de manera científica la eficacia de la estimulación cognitiva para retrasar el deterioro cognitivo que produce la demencia.

Me pregunto si  la administración ha pensado en ello o simplemente ha elaborado un documento generalista por pura comodidad, porque hay que tener en cuenta que lo que para unas personas puede ser una Atención Centrada en la Persona según este modelo, para otras puede suponer  una decadencia, una “Inatención no Centrada en las Necesidades de la Persona”.

Y por qué no reflejarlo, aunque quede un tanto presuntuoso, la cantidad de  responsabilidades asignadas a las personas directoras de centros, en mi opinión son inalcanzables y excesivas para una sola figura e incluso muchas de ellas son obvias, pero otras…

¿Qué pretenden desde Conselleria? ¿Una persona omnipresente, omnipotente? Si  la dirección de un centro pasa a realizar todas las tareas que desde Conselleria indican, afectaría a su implicación en el día a día del centro, en la interacción con las personas usuarias y con sus familias, cuando desde los centros solo nos interesa asegurarnos en primera persona el bienestar de las personas usuarias del centro, que al final es el objetivo y motor de nuestro trabajo como responsables del mismo.

            Sinceramente, tenía muchas esperanzas en esta nueva metodología, en el nuevo modelo de atención, porque lo creía necesario en muchos centros. Tenía esperanza en este Gobierno Autonómico, en esta Conselleria, la esperanza de que por fin nuestro sector fuera escuchado y tenido en cuenta, pero he podido comprobar el hermetismo que muestra esta Administración  ante la expresión de sugerencias, dudas y peticiones realizadas por diferentes entidades.

En mi mente solo aparece la palabra Decepción y en mi corazón el sentimiento de Impotencia.

Nuria Martínez Enguix

Directora del Centro de Día Benicalap de AFAV